Planes para preservar y potenciar el esplendor natural y cultural de Bandama

Hace unos 2.000 años, la erupción que creó la Caldera-Pico de Bandama transformó el paisaje, posteriormente convertido en viñedos tras su colonización en el siglo XV.

La joya del vulcanismo de Gran Canaria presenta varios elementos de interés natural y cultural, incluyendo el volcán doble de Bandama, su enorme diversidad biológica, así como el patrimonio arqueológico de la zona, con poblados trogloditas y silos fortificados.

A pesar de todas estas cualidades, sigue ausente un Centro de Visitantes e Interpretación adecuado, así como el mantenimiento del mirador del Pico de Bandama y del patrimonio etnográfico del toda el área.

Ayer, los concejales María Lozano Lordán y Adrián García Armas, responsables de las áreas de Urbanismo, y Medio Ambiente y Turismo, respectivamente, del Ayuntamiento de la Villa de Santa Brígida, se reunieron en una sesión de trabajo interadministrativa en el Cabildo de Gran Canaria para avanzar en la propuesta de soluciones integrales para el Monumento Natural de Bandama.

El propósito principal fue abordar los desafíos y oportunidades que presenta el Pico y la Caldera, de especial singularidad geológica y gran potencia paisajística, que ofrece magníficas vistas de las zonas Centro, Norte y Este de la isla, y que ha experimentado un abandono evidente en los últimos años, reflejado en el cierre intermitente de la casa del Mirador, una atracción para los más de 400.000 visitantes anuales, que se encuentra sin servicios y en ausencia total de vigilancia. 

La reunión contó con la presencia no solo de los equipos técnicos pertinentes, sino también de los consejeros de Medio Ambiente y Obras Públicas del Cabildo de Gran Canaria, Raúl García Brink y Augusto Hidalgo, respectivamente.

Durante el encuentro, nuestros concejales aprovecharon la ocasión para plantear diversas cuestiones de importancia, que abordan temas clave relacionados, entre ellos, con la travesía del Monte. Entre estos planteamientos, destacan propuestas para dotar a la zona de infraestructuras vitales, como áreas de estacionamiento y lugares de encuentro locales. Además, se aportaron diversas estrategias para fomentar un turismo sostenible y respetuoso que garantice la preservación de este valioso patrimonio natural, cultural e histórico de la isla.