El Ayuntamiento colabora con la asociación APAN y la Fundación Flexer de ayuda a niños/as con cáncer

La Concejalía de Salud Pública del Ayuntamiento satauteño colabora con la campaña iniciada por la Asociación de Ayuda a la Niñez (APAN) y la Fundación Flexer de ayuda al niño/a con cáncer para dar visibilidad a esta problemática y contribuir a las campañas de sensibilización que realizan estas entidades respecto a la importancia de esta enfermedad así como su detección precoz.

Con la campaña que se está realizando, se pretende concienciar a toda la población de la importancia de realizar con periodicidad las pruebas diagnósticas, así como facilitar la difusión de información cuyo fín es aumentar el conocimiento acerca de la enfermedad y, por ende, conseguir disminuir su incidencia. En este sentido, la Corporación satauteña colabora con una donación de bolígrafos corporativos para que puedan utilizarlos junto a otros materiales que ceden otros organismos y entidades en las acciones divulgativas de estas entidades, por lo que se ha certificado la colaboración de la institución con la campaña.

Alrededor de 250.000 niños/as en el mundo enferman de cáncer cada año. El 80% de ellos no son diagnosticados o no tienen acceso al tratamiento adecuado, produciéndose por esta causa muertes innecesarias. De aquellos que acceden al tratamiento, la necesidad de rehabilitación y soporte por periodos prolongados no es adecuadamente reconocida. La mayoría de los/as niños/as en los países en desarrollo no tienen acceso a esos derechos básicos.

La Declaración de Montevideo de la Sociedad Internacional de Oncología Pediátrica agrega a estos datos otros aspectos, como el hecho de que el cáncer infantil toma creciente importancia en países con recursos limitados, por el sustancial incremento del número de niños en la población como resultado de los altos índices de natalidad y el descenso de la mortalidad por enfermendades de denuncia obligatoria o malnutrición.

La mortalidad por cáncer infantil puede ser reducida, estableciendo programas de hemato-oncología pediátrica, que provean terapia básica gratuita para todos los niños/as que necesiten tratamiento. La implementación de dichos programas debe ser considerada como un paso hacia la aplicación de la Convención de los Derechos del Niño/a de las Naciones Unidas, la cual establece que todo niño y niña tiene derecho a la vida, a tratamiento de enfermedades, a rehabilitación de su salud y a educación.

Los sobrevivientes o recuperados de cáncer infantil necesitan apoyo después del tratamiento para reintegrarse socialmente sin discriminación. Las familias necesitan soporte más allá de completado el tratamiento médico para también ellos y ellas retomar su vida social.