Han aparecido cuatro gatos muertos de una colonia sita en El Estanco de La Angostura, en la Villa satauteña. En espera de la necropsia para saber la causa de los fallecimientos, todo apunta a que han sido envenenados.
Acabar con la vida de cualquier animal es un acto atroz, pero este tipo de muerte por envenenamiento es particularmente cruel, y parece que en esta colonia en la que vivian 18 gatos quedan tan sólo seis.
El Ayuntamiento de Santa Brígida a través de la Concejalía de Bienestar Animal ha mostrado su absoluta preocupación por estos hechos. La concejal del área, Rosalía Rodríguez Alemán, pide a los propietarios que «extremen la vigilancia de sus mascotas, hasta que se localiza al responsable de estos hechos».
Desde la Concejalía de Bienestar Animal se recuerda que envenenar a colonias felinas constituye la comisión de delitos tipificados en los artículos 336 y 337 del Código Penal, además de suponer un riesgo para la seguridad ciudadana y también un posible riesgo para la salud pública. “Este veneno para provocar la muerte de gatos u otros animales pueden ocasionar también lesiones por intoxicación o incluso la muerte a niños o personas adultas”, advierte la edil.
Segun la nueva Ley de Bienestar animal dentro de las sanciones muy graves, de 50.001 a 200.000 euros, estaría el envenenamiento a los llamados gatos asilvestrados. Llevar a cabo esta práctica podría ser castigado, además, con hasta 24 meses de prisión.
Por todo ello la concejal pide la colaboración ciudadana para evitar este tipo de acontecimientos.
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